jueves, 21 de abril de 2011

La autoestima


Cuando el amor a sí mismo no es correspondido
 
La autoestima –ese registro a la vez tan íntimo y tan dependiente de los otros– es examinada con detalles por el autor de esta nota: “Por autoestima entendemos esa autoevaluación que expresa aprobación/desaprobación. La autoestima, como un sitio web, alguna vez estuvo en construcción, cada tanto es actualizada y está siempre on line, a menos que se tilde”.

Por Luis Hornstein

 
La autoestima es una experiencia íntima: es lo que pienso y lo que siento sobre mí mismo, no lo que piensa o siente alguna otra persona acerca de mí. Mi familia, mi pareja y mis amigos pueden amarme, y aun así cabe la posibilidad de que yo no me ame. Mis compañeros de trabajo pueden admirarme y aun así yo me veo como alguien insignificante. Puedo proyectar una imagen de seguridad y aplomo que engañe a todo el mundo y aun así temblar por mis sentimientos de insuficiencia. Puedo satisfacer las expectativas de otros y aun así fracasar en mi propia vida. Puedo ganar todos los honores y aun así sentir que no he conseguido nada. Millones de personas pueden admirarme y aun así me levanto cada mañana con un doloroso sentimiento de fraude y un vacío interno.

Fragmentos de Autoestima e identidad. Narcisismo y valores sociales, que distribuye en estos días el Fondo de Cultura Económica.

Ver artículo completo en Página12.

2 comentarios:

Mariana dijo...

Creo que a la autoestima sólo le damos el valor que le corresponde cuando hemos tardado años en podernos construir una sólida.

Marxe dijo...

Es posible, Marian; a veces cuando uno está en medio de la confusión no puede darse cuenta de nada. Pero por ahi se abre una brecha y podemos salir y ver lo que está pasando. Y empezar a construir.